lunes, 29 de diciembre de 2014

Espolón calcáneo: síntomas y tratamiento


Espolón calcáneo: síntomas y tratamiento

¿Lo has padecido en alguna ocasión?  Es una realidad muy común, ocasionada por una formación ósea muy pequeña en nuestro talón. Produce dolor y nos impide realizar actividades cotidianas. Debes tener paciencia y seguir unas pautas adecuadas para poder recuperarte por completo. Te lo explicamos.


¿Por qué sufrimos el llamado “espolón calcáneo?

Según nos dicen los traumatólogos, lo sufren en general una de cuatro personas. Es decir, todos tenemos una alta probabilidad de experimentar el espolón calcáneo en alguna ocasión. Se sucede por la aparición de una pequeña espícula ósea justo en el talón.
Pero, ¿por qué aparece? Básicamente surge a causa de la edad, es lo más habitual. Pero es común a su vez en personas jóvenes que se ven obligadas a pasar mucho tiempo de pie. El disponer de unos kilos de más sería también un factor a tener en cuenta.
Otro dato a tener en cuenta es que la probabilidad nos dice que es también muy habitual entre personas con un tendón de Aquiles poco elástico, así pues, en muchas ocasiones escapa de la prevención. Dependiendo de tu anatomía y de las características de tu pie, puedes tener mayor o menor riesgo de sufrir el molesto espolón calcáneo.
¿Qué síntomas presenta el espolón calcáneo?

·         El espolón calcáneo presenta ante todo unos dolores punzantes cuya intensidad, dependen del esfuerzo que hagas.
·         El dolor es más fuerte por las mañanas, sobre todo cuando apoyamos el talón por primera vez. Al estar tantas horas inactivo, ese primer paso es siempre bastante doloroso.
·         El dolor está localizado en un punto en concreto del talón, y lo identificamos muy bien.
·         Otro aspecto a tener en cuenta es que, debido a la presión que ejerce el calzado sobre esa espícula ósea, es muy común que la zona aparezca roja e inflamada. El dolor es muy elevado.

Ejercicios adecuados para ayudar a resolver el espolón calcáneo



1. Ejercicio de la toalla en el suelo 


Además de las pautas que nos indique nuestro médico y traumatólogo, sería indicado que siguiésemos las siguientes. El ejercicio es muy adecuado para ayudar a tratar el espolón calcáneo. Pero eso sí, debes hacerlo con cuidado evitando ante todo sobrecargarlo.
Este ejercicio es bien fácil. Siéntate en una silla o en el sofá para no perder el equilibrio, después, pon una toalla en el suelo frente a ti e intenta cogerla con los dedos del pie. Esos sencillos movimientos te ayudarán a recuperar la movilidad y aliviar el espolón calcáneo. Muy fácil. Hazlo unas 3 veces al día.
2. Pequeños estiramientos
Muy fácil, tal y como ves en la imagen no tendrías más que apoyarte en los bordes de una mesa y hacer como si empujaras. De ese modo una de las piernas queda flexionada, y la otra ejerce un pequeño estiramiento en la zona del talón. Haz este ejercicio al menos durante 5 minutos dos veces al día. Algo suave, sin cansarte.
3. Hacer rodar una botella de agua

Otro ejercicio bien sencillo y relajante. Sería adecuado que llenaras una botella de agua y la llevaras al refrigerador para que se congelara. Una vez congelada, la ponemos en el suelo sobre una toalla, ahora pon el pie sobre ella, el pie donde sufras de espolón calcáneo, y hazla rodar sobre tu planta del pie. Un movimiento repetitivo que deberá durar al menos 5 minutos. Hazlo tres veces al día.
Como ves, este tipo de ejercicios basados en sencillos estiramientos, son muy efectivos. Por las noches, puedes ayudarte de un tipo de férulas muy adecuadas para tratar el espolón calcáneo. Son un tipo de vendas que encontrarás en las farmacias. Con el tiempo irás encontrándote mejor, aunque ya sabes que en muchos casos se necesita de una operación para resolver el problema. Así que ten paciencia y cuídate.