Que el Sol rota es un resultado observacional conocido desde la
época en que Galileo apuntó por primera vez al cielo con su telescopio en 1608.
Contrariamente a las ideas de la época, apoyadas por Aristóteles y aceptadas por la iglesia católica como dogmas de fe, de que los objetos celestes, incluido el Sol, eran objetos perfectos y sin mancha, las observaciones de Galileo demostraron que en la superficie del Sol existían manchas oscuras que aparecían y desaparecían con periodos de días o semanas. Estas manchas se movían sobre el disco
Contrariamente a las ideas de la época, apoyadas por Aristóteles y aceptadas por la iglesia católica como dogmas de fe, de que los objetos celestes, incluido el Sol, eran objetos perfectos y sin mancha, las observaciones de Galileo demostraron que en la superficie del Sol existían manchas oscuras que aparecían y desaparecían con periodos de días o semanas. Estas manchas se movían sobre el disco
solar de este a oeste y tardaban unas dos semanas en cruzarlo.
Galileo explicó acertadamente estas observaciones por medio de la rotación del
Sol sobre un eje ligeramente inclinado hacia la Tierra.
Hoy sabemos que, en efecto, el Sol rota sobre un eje que tiene una inclinación máxima de unos 7 grados respecto del plano en el que órbita la Tierra, y también sabemos que el Sol, que no es un sólido rígido, rota de forma diferencial, es decir, rota más rápido en el ecuador que en los polos, de forma que, mientras en el ecuador tarda unos 25 días en dar una vuelta completa, cerca de los polos tarda más de 30 días. Esta rotación diferencial del Sol juega un papel muy importante en la vida de nuestra estrella ya que, junto con la convección, es la responsable de la generación y mantenimiento del campo magnético solar según las teorías actuales.
Hoy sabemos que, en efecto, el Sol rota sobre un eje que tiene una inclinación máxima de unos 7 grados respecto del plano en el que órbita la Tierra, y también sabemos que el Sol, que no es un sólido rígido, rota de forma diferencial, es decir, rota más rápido en el ecuador que en los polos, de forma que, mientras en el ecuador tarda unos 25 días en dar una vuelta completa, cerca de los polos tarda más de 30 días. Esta rotación diferencial del Sol juega un papel muy importante en la vida de nuestra estrella ya que, junto con la convección, es la responsable de la generación y mantenimiento del campo magnético solar según las teorías actuales.
Aproximadamente en el último tercio del radio solar, la energía
que se ha generado en el interior de la estrella, al propagarse hacia el
exterior, genera un movimiento de materia similar al de un líquido cuando
hierve, donde el material más caliente asciende, se enfría y desciende de nuevo:
es la zona convectiva solar. Hoy en día se acepta que el campo magnético solar
se regenera continuamente a partir de la combinación de la rotación diferencial
y de los movimientos convectivos en la parte externa del Sol. A este mecanismo
se le denomina “efecto dinamo”, por ser similar a las dinamos de los motores de
los coches.
Este campo magnético solar, generado con la ayuda de la rotación diferencial del Sol, es el responsable de todos los fenómenos activos de la superficie del Sol, así como de las emisiones de gas y del viento solar.
Este campo magnético solar, generado con la ayuda de la rotación diferencial del Sol, es el responsable de todos los fenómenos activos de la superficie del Sol, así como de las emisiones de gas y del viento solar.
Fuente: Grupo
Amateur de Meteorología Espacial GAME