Olvídate de la vacuna
contra la gripe, ya que recientemente se ha encontrado que son dañinas para el
cuerpo. Una crema como antibiótico natural basada
en más de 50 dientes de ajo, cebolla, tomillo y limón destruirá casi cualquier
virus que entra en tu camino incluyendo resfriados y gripe.
A medida que
estornudamos y tosemos todo el camino a través de esos meses oscuros de
contagio,el ajo ha sido aclamado por sus poderes para detener los virus. Se
ha ganado su reputación como destructor de virus gracias a uno de sus
componentes químicos: la alicina.
El poder de la alicina
– componente principal del ajo
Cuando se tritura el
ajo, la aliina se convierte en alicina. La investigación muestra que la alicina
ayuda a reducir el colesterol y la presión arterial y también ayuda previene la
formación de coágulos sanguíneos. El ajo también puede reducir el riesgo de desarrollar aterosclerosis
(endurecimiento de las arterias). Los compuestos de este bulbo familiar matan a
muchos organismos, incluyendo bacterias y virus que causan dolores de oído,
la gripe y los resfriados. Las investigaciones indican que el ajo es también
eficaz contra enfermedades digestivas y diarrea. Lo que es más, otros estudios
sugieren que esta hierba común y familiar puede ayudar a prevenir la aparición
de cáncer.
Esta sustancia química
se ha conocido durante mucho tiempo por sus poderes anti-bacterial y
anti-hongos. Debido a esto, la gente asume que va a fortalecer su sistema
inmunológico. Hay mucha gente que simplemente macera el ajo, mezclándolo con
aceite de oliva y untándolo en pan. Hay otras formas de usar el ajo para tratar
enfermedades, por ejemplo los tés, los jugos, las cremas o
sopas también.
Es así que hoy te
presentamos una receta saludable y medicinal crema de ajo que
no le pide nada a los antibióticos ordinarios, al contrario, esta receta no
tiene efectos secundarios y es además, exquisita.
Crema de ajo como
antibiótico natural
Ingredientes
Para 4 personas
Para 4 personas
·
26 dientes de ajo (sin
pelar)
·
2 cucharadas de aceite
de oliva
·
2 cucharadas (1/4
barra) de mantequilla orgánica
(libre pastoreo pasto)
·
1/2 cucharadita de
polvo de cayena
·
1/2 taza de jengibre fresco
·
2 1/4 tazas de
cebollas en rodajas
·
1 1/2 cucharaditas de
tomillo fresco picado
·
26 dientes de ajo,
pelados
·
1/2 taza de leche de
coco —> Cómo hacer leche de coco
·
3 1/2 tazas de caldo
de vegetales orgánico
·
4 rodajas de limón
Instrucciones
Precalienta el horno a 180° C (350° F).
Coloca 26 dientes de ajo en plato pequeño de vidrio para hornear. Añade 2
cucharadas de aceite de oliva y espolvorear con sal marina y revuelve para
cubrir. Cubre fuente de horno bien con papel aluminio y hornea hasta que el ajo
esté marrón y tierno, unos 45 minutos. Enfría. Aprieta el ajo entre los dedos
para liberar los dientes. Traslada los dientes a un tazón pequeño.
Derrite la mantequilla en
una cacerola grande a fuego medio-alto. Agrega la cebolla, el tomillo, jengibre
y cayena en polvo y cocinar hasta que las cebollas estén transparentes, unos 6
minutos. Agrega el ajo asado y 26 dientes de ajo crudos y cocina por 3 minutos.
Añadir el caldo de verduras; cubre y cocina a fuego lento hasta que el ajo esté
tierno, unos 20 minutos. Una vez estando tiernos moler toda esta mezcla en la
licuadora hasta que quede suave. Lleva de regreso esta mezcla ya batida a la
cacerola; agregar la leche de coco y llevar a fuego lento. Sazonar con sal y
pimienta para darle sabor.
Exprima el jugo de un
limón en cada plato con la crema de ajo y servir. Se puede preparar con 1 día
por adelantado. Cubre y refrigera. Recalentar a fuego medio, revolviendo
ocasionalmente.