La fibromialgia es una enfermedad que
afecta al 4% de la población en especial a las mujeres entre 40 y 50 años.
La fibromialgia no debe ser confundida con la artritis, ya que aunque produce dolores similares en las articulaciones, no causa inflamación sino, más bien, afecta a los músculos.
La fibromialgia no debe ser confundida con la artritis, ya que aunque produce dolores similares en las articulaciones, no causa inflamación sino, más bien, afecta a los músculos.
Su origen es desconocido aún, pero,
según estudios recientes, existe cierta disposición genética que favorece su
desarrollo, ya que afecta a diferentes miembros de una familia.
Entre los síntomas más comunes de
fibromialgia están:
Persistentes dolores musculares y en los
tejidos que conectan los huesos, ligamentos y tendones de diferentes partes del
cuerpo, como el cuello, los hombros, la cadera, las piernas, los brazos y hasta
los músculos de los ojos.
Sensibilidad exagerada a la presión en determinadas zonas del cuerpo, como el estómago.
Cansancio
Insomnio
Depresión
Calambres en las piernas
Dolor de cabeza
Migraña
Dolor de mandíbulas
Espasmos musculares
Rigidez sobre todo al levantarse por las mañanas.
Sensación de hinchazón en manos y pies.
Dolores más intensos durante la menstruación.
Para aliviar la fibromialgia, se recomienda el consumo de hierbas y plantas que poseen propiedades para relajar los músculos de la tensión y aliviar el dolor.
Sensibilidad exagerada a la presión en determinadas zonas del cuerpo, como el estómago.
Cansancio
Insomnio
Depresión
Calambres en las piernas
Dolor de cabeza
Migraña
Dolor de mandíbulas
Espasmos musculares
Rigidez sobre todo al levantarse por las mañanas.
Sensación de hinchazón en manos y pies.
Dolores más intensos durante la menstruación.
Para aliviar la fibromialgia, se recomienda el consumo de hierbas y plantas que poseen propiedades para relajar los músculos de la tensión y aliviar el dolor.
Remedios populares
1: Preparar una infusión de dos cucharadas de tomillo seco, por medio litro de agua, y beber un par de tazas pequeñas, al día.
1: Preparar una infusión de dos cucharadas de tomillo seco, por medio litro de agua, y beber un par de tazas pequeñas, al día.
2: Añadir un litro de la anterior
infusión de tomillo, al agua de baño. Realizar baños durante 15 ó 20 minutos.
3: Aplicar vinagre de manzana sobre la
zona dolorida.
4: Hervir, durante 5 minutos, dos gramos
de la corteza seca de sauce en una taza con agua. Tomar dos o tres tazas al
día. Debido a su contenido en salicina, principio de la aspirina, calma el
dolor.
5: Consumir dos cucharaditas de jengibre
en polvo disuelto en un vaso con agua. Beber dos veces al día.
6: Hervir una cucharadita de las flores
de hipérico o hierba de San Juan en una taza con agua durante 5 minutos. Tomar
dos veces al día.
7: Realizar una decocción, durante 30
minutos, de100 gramos de cola de caballo seca, por litro de agua. Beber dos
tazas al día.
8: Verter 35 gramos de flores de
caléndula en un litro de alcohol de 45 grados. Reposar 15 días y aplicar
compresas sobre la zona afectada.
Recomendaciones
Incorporar alimentos ricos en magnesio
como espinacas, lechugas, espárragos, germen de trigo y levadura de cerveza
para mantener los músculos y tendones en buen estado. Según estudios, las
personas que sufren de esta dolencia al consumir magnesio presentan menos
episodios de dolor. .
Consumir alimentos con selenio como la
cebolla, ajo, coles, naranja, pepino, calabaza y manzana, ya que ayuda a
disminuir la sensación de dolor.
Ingerir alimentos RICOS EN CALCIO como
cardo mariano, brocoli, espinacas, berros…, ya que una baja concentración de
calcio en sangre produce espasmos musculares.
Consumir alimentos que contengan
vitamina C como en las frutas cítricas, fresas y cerezas (por sus propiedades
antioxidantes ayuda a conservar las células musculares contra la degeneración y
los dolores musculares)
Realizar actividad física como caminar,
andar en bicicleta y nadar, de forma regular para restaurar e! tono muscular
apropiado.
Evitar las actividades aeróbicas de alto
impacto y el levantamiento de peso cuando mientras se tenga dolor.
Efectuar algunos ejercicios recomendados
como los siguientes:
Tumbarse boca arriba con las rodillas
dobladas y los pies apoyados en el suelo, Levantar la pierna y llevar la
rodilla hacia el pecho. Realizar dos series de 30. Este ejercicio es indicado
para la columna.
Tumbado boca arriba con las rodillas dobladas y los pies apoyados. En ese momento juntar y separar las rodillas, en 30 repeticiones, mientras la espalda permanece pegada al piso.
Tumbado boca arribaron las rodillas dobladas y los pies apoyados, llevar las rodillas juntas hacia un lado y otro, sin forzar la caída de las piernas. Dos series de 15 repeticiones.
Sentado, con la espalda erguida, abrazar el propio cuerpo y deja caer la cabeza hacia delante. Conservar la postura durante 10 segundos, y repetir tres veces.
Sentado, con la espalda erguida, llevar las manos con las palmas hacia delante (entrecruzando los dedos),y la espalda hacia atrás. Mantener la postura cinco segundos y repetir cuatro veces.
Sentados, con la espalda erguida, colocar un brazo detrás de la cabeza e inclinar hacia donde señala la mano, sin levantarse de la silla. Repetir dos veces de cada lado.
Sentado, con la espalda erguida, llevar un brazo hacia arriba, de manera que quede el codo al lado de la cabeza, doblar el codo y con el otro brazo intentar llevarlo hacia atrás. Repetir dos veces con cada brazo, y mantener la postura cinco segundos.
De pie, doblar una de las rodillas y agarrar el tobillo con la mano, intentar llevarlo hacia arriba. Conservar esta postura durante 10 segundos. Repetir tres veces cada una.
Sentado en el piso, con las rodillas estiradas, intentar tocar los pies con las manos. Mantener esta postura durante 10 segundos y repetir tres veces.
Tumbado boca arriba, con una pierna doblada, mientras la otra está estirada, intentar acercarla y alejarla de la línea media. Realizar 20 repeticiones
Tumbado boca arriba con las rodillas dobladas y los pies apoyados. En ese momento juntar y separar las rodillas, en 30 repeticiones, mientras la espalda permanece pegada al piso.
Tumbado boca arribaron las rodillas dobladas y los pies apoyados, llevar las rodillas juntas hacia un lado y otro, sin forzar la caída de las piernas. Dos series de 15 repeticiones.
Sentado, con la espalda erguida, abrazar el propio cuerpo y deja caer la cabeza hacia delante. Conservar la postura durante 10 segundos, y repetir tres veces.
Sentado, con la espalda erguida, llevar las manos con las palmas hacia delante (entrecruzando los dedos),y la espalda hacia atrás. Mantener la postura cinco segundos y repetir cuatro veces.
Sentados, con la espalda erguida, colocar un brazo detrás de la cabeza e inclinar hacia donde señala la mano, sin levantarse de la silla. Repetir dos veces de cada lado.
Sentado, con la espalda erguida, llevar un brazo hacia arriba, de manera que quede el codo al lado de la cabeza, doblar el codo y con el otro brazo intentar llevarlo hacia atrás. Repetir dos veces con cada brazo, y mantener la postura cinco segundos.
De pie, doblar una de las rodillas y agarrar el tobillo con la mano, intentar llevarlo hacia arriba. Conservar esta postura durante 10 segundos. Repetir tres veces cada una.
Sentado en el piso, con las rodillas estiradas, intentar tocar los pies con las manos. Mantener esta postura durante 10 segundos y repetir tres veces.
Tumbado boca arriba, con una pierna doblada, mientras la otra está estirada, intentar acercarla y alejarla de la línea media. Realizar 20 repeticiones